El universo observable, tal como lo revela el fondo cósmico de microondas (CMB), presenta una sorprendente homogeneidad térmica a gran escala. La temperatura promedio de esta radiación fósil es de \(\sim 2{,}725\ \text{K}\), con fluctuaciones del orden de \(10^{-5}\). Sin embargo, algunas regiones del cielo están tan distantes que nunca han podido interactuar causalmente desde el Big Bang, ya que la luz no ha tenido tiempo de viajar entre ellas. ¿Cómo explicar entonces una temperatura tan uniforme?
En un modelo clásico del Big Bang sin inflación, las regiones separadas por más de un ángulo de \(\sim 1\)° en la esfera celeste no han podido intercambiar luz o información desde el comienzo del universo. El horizonte causal define este límite de contacto: es la distancia máxima recorrida por la luz desde el Big Bang. Sin embargo, el CMB parece indicar una isotropía mucho más allá de este horizonte. Esta contradicción se denomina problema del horizonte.
Para resolver este paradoja, la teoría de la inflación cósmica, introducida en los años 1980 por Alan Guth, propone una expansión exponencial muy rápida del espacio-tiempo alrededor de \(10^{-36}\) s después del Big Bang. Durante un período extremadamente breve, el volumen del universo habría crecido en un factor superior a \(10^{26}\). Esta fase habría puesto en contacto causal regiones hoy muy distantes, explicando la uniformidad observada.
La inflación no solo resuelve el problema del horizonte. También proporciona condiciones iniciales homogéneas y casi planas, explicando la baja curvatura del universo (\(\Omega \approx 1\)) y la estructura a gran escala. Además, predice un espectro de fluctuaciones cuánticas amplificadas durante esta fase, origen de las anisotropías del CMB observadas por WMAP y Planck.
La fase inflacionaria podría estar vinculada a una transición de fase en un campo escalar (el campo del inflatón), cuyo potencial estaría gobernado por la física de altas energías (\(E \gg 10^{15}\ \text{GeV}\)). Este campo podría representar una manifestación de una teoría unificada (GUT), conectando las interacciones fundamentales al principio del universo.
El problema del horizonte ha catalizado la elaboración del paradigma inflacionario, hoy ampliamente aceptado. Sin embargo, el origen mismo de la inflación, la naturaleza del campo inflatón y la salida de esta fase siguen siendo inciertos. La comprensión de esta época primitiva es esencial para conectar la cosmología y la física fundamental.