Este viaje comienza con la vista familiar de la brillante constelación de Orión, donde vemos El Cazador a la derecha y la brillante estrella Sirio en la parte inferior izquierda. Luego nos acercamos a la región de Hunter's Sword que revela la Nebulosa de Orión, también conocida como Messier 42. La Nebulosa de Orión es una gran guardería estelar ubicada a unos 1 350 años luz del Sol. La pequeña nebulosa a su izquierda arriba es la nebulosa M43. Luego pasamos a la vista del telescopio terrestre VISTA del Monte Paranal, que observa en la parte infrarroja del espectro electromagnético. VISTA nos lleva a un gran zoom que nos permite admirar todo el esplendor de la Nebulosa de Orión y sus alrededores, en una sola imagen. Gracias a su visión infrarroja, este telescopio puede escudriñar en profundidad las regiones difusas y polvorientas normalmente ocultas. Aquí revela magníficas estrellas jóvenes muy activas que acechan en densas nubes de gas y polvo. Las observaciones en el dominio infrarrojo permiten a los astrónomos observar el universo frío. El gas brillante de M42 rodea estrellas jóvenes y calientes en el borde de una enorme nube molecular. En el corazón de la nebulosa, cuatro estrellas azules, formando un trapecio, iluminan a gran distancia la materia difusa dispersa en el espacio. Los átomos absorben la luz estelar y la vuelven a emitir según sus propios colores. El de oxígeno verde, los de hidrógeno y nitrógeno son rojos. Las observaciones de radio astronómicas nos dicen que la Nebulosa de Orión es solo una pequeña parte de la gran nube opaca de Orión. De la contracción de esta nube nacieron las estrellas del Trapecio así como un grupo de nebulosas proto-estelares ubicadas detrás de la Nebulosa de Orión. La Nebulosa de Orión fue descubierta en 1610 por Nicolas-Claude Fabri de Peiresc, quien aparentemente fue el primero en notar su apariencia nebulosa. Ptolomeo (100-170 dC), Tycho Brahe (1546-1601) y Johann Bayer (1572-1625) identificaron las estrellas en el centro de la nebulosa como una sola estrella grande. |